Aunque la araña roja (Tetranychus urticae) es, probablemente, uno de los ácaros más conocidos, existen especies relacionadas que afectan a cultivos específicos. Es el caso de la conocida como araña amarilla, representada por la especie Eotetranychus carpini y que afecta principalmente al cultivo de la viña.
Este ácaro de la familia de los tetraníquidos está presente actualmente en casi la totalidad de las zonas vitivinícolas de España, especialmente en los entornos con veranos más secos y con temperaturas más altas, un entorno propicio para el desarrollo de esta plaga.
El objetivo de este artículo es ayudar en su identificación y dar algunos consejos sobre la prevención y control de la plaga cuando se manifiesta por encima del umbral de daño al cultivo.
Identificación de araña amarilla (Eotetranychus carpini)
Los ataques de ácaros suelen iniciarse en primavera, cuando remontan las temperaturas y la humedad desciende progresivamente. Bajo estas condiciones, la araña amarilla empieza a activarse y el número de reproducciones se dispara.
Estos ácaros de pequeño tamaño y de color amarillo los podemos encontrar en todas las áreas con cultivo significativo de viña, excepto en áreas muy húmedas, como las gallegas.
La identificación de los distintos estadios de la plaga la realizamos de la siguiente manera:
- Adulto: cuerpo de forma ovalada y 4 pares de patas, 8 en total. Podemos diferenciar entre macho y hembra, siendo la hembra de un tamaño ligeramente superior a la del macho. La longitud de los individuos adultos es de 0,5 mm de longitud, por lo que cuesta verlos en movimiento, salvo con lupa.
- Huevos: tamaño esférico con 0,1 mm de diámetro, casi traslúcidos a simple vista, y progresivamente evolucionan con tonalidades más amarillentas (incluso ámbar).
Esta plaga de actividad estival pasa el invierno en estado ninfal o incluso adulto, pero protegido del frío en la corteza de las cepas, hojas caídas o en malas hierbas. Antes del movimiento de yemas en la vid, las hembras inician su actividad, aun con cierto frío en el ambiente (a partir de marzo o abril, dependiendo de la zona).
Bien entrado en primavera, los adultos se movilizan a las hojas de vid recién brotadas, a partir de mayo, donde van colonizando todos los brotes, especialmente los de la parte inferior, alimentándose de la savia producida por la viña e iniciando la multiplicación de forma vertiginosa.
Según la climatología, durante la primavera y verano pueden pasar de 10 a 15 generaciones, disparándose según mayor temperatura y menor humedad. Las condiciones óptimas para su desarrollo se encuentran en el rango de 30-35 ºC, hasta los 40 ºC, con una humedad relativa de entre 30-45%.
En este ciclo, la hembra puede llegar a poner entre 50 y 90 huevos aproximadamente, según las condiciones atmosféricas.
Periodo de actuación de la plaga
Los ácaros tetraníquidos, tanto araña roja (Tetranychus urticae) como araña amarilla (Eotetranychus carpini), necesitan condiciones atmosféricas de calor y estaciones secas. No soportan el clima frío y la humedad relativa alta, reduciendo el número de generaciones producidas.
Por ello, la mayor incidencia de araña amarilla se da entre los meses de mayo a agosto, prácticamente todo el periodo que abarca desde la brotación hasta casi el envero final de la uva.
Es en mayo y junio (dependiendo del frío de la zona), cuando la hembra coloniza generalmente la parte inferior de la planta, avanzando progresivamente y causando daños en la totalidad de la masa aérea de la viña. La multiplicación y alimentación suele producirse sobre las hojas tiernas, ya que los adultos tienen más facilidad para extraer todo el jugo de la savia.
En el caso de que se haya dado un ataque muy fuerte en una viña, con defoliación parcial o total en septiembre, influye en el ciclo futuro de la araña amarilla, ya que esto impide que se sigan produciendo nuevas generaciones.
Leer más: mecanismos de control de la filoxera de la vid
Síntomas iniciales de araña amarilla. Izda,variedad uva blanca y dcha, variedad tinta
Daños causados sobre la planta
Los daños causados por la araña amarilla en el cultivo de la viña suelen estar relacionados con el debilitamiento general del cultivo por succión de la savia. Los ataques de los adultos causan deformaciones en las hojas, cambio en el color y, en ataques avanzados, defoliación prematura de la planta.
Daños causados al inicio de la vegetación
Los primeros ataques, generalmente sobre las hojas inferiores, causan deformación en las hojas, reducción del tamaño de los racimos y acortamiento de los entrenudos. Las hojas afectadas cambian su tonalidad a colores más amarillentos rojizos y cobrizos, por lo que las cepas afectadas son fáciles de identificar.
Las hojas más afectadas suelen coincidir con las basales, ascendiendo lentamente según avanza la plaga.
Daños causados en plena producción (verano)
Según avanza la plaga, las temperaturas ascienden y la humedad relativa desciende, las poblaciones de araña amarilla tienden a aumentar. Gran parte de la masa foliar de la viña cambia de color, con tonalidades cloróticas y rojos muy llamativos, pero conservando las nerviaciones con su verde original.
En los casos donde las hojas se encuentren muy debilitadas por la succión de savia, la hoja tiende a caer prematuramente.
Pérdida de producción y calidad de la uva
El debilitamiento general de la cepa y la falta de energía ocasiona una drástica caída de la producción, generando alteraciones en la calidad de la uva. Además, la caída prematura de las hojas hace que la acumulación de reservas para la siguiente campaña también se reduzca considerablemente, por lo que puede afectar a la futura producción y al grado alcohólico producido.
En general, no es tan común que se lleguen a producir daños sobre los frutos, aunque pueden aparecer punteados necróticos en casos aislados y con una alta población de araña amarilla.
Cómo controlar la araña amarilla
Esta parte es fundamental, habiendo identificado previamente que se trata de un ataque de araña amarilla, toca profundizar en los tratamientos autorizados para su control. Las estrategias de prevención de la plaga pasan por evitar que las cepas de viña generen una masa foliar muy densa que facilita el trabajo al ácaro.
Leer más: guía y calendario de tratamientos en viña.
Prevención de los ataques y medidas culturales
Control de malas hierbas
Las malas hierbas cercanas a las cepas pueden ser un refugio para los adultos a partir de septiembre y a inicios de la actividad en la futura campaña, antes de primavera. Si bien, desde el punto de vista medioambiental, no es aconsejable eliminar el 100% de la cobertura de las hierbas adventicias para mejorar la estructura del suelo, sí se recomiendan pases de arado y recortes de hierba para evitar la proliferación de la araña amarilla.
Poda y mantenimiento de la estructura del árbol
La poda de la viña tienen grandes beneficios desde varios puntos de vista. Por un lado, mantenemos el control de la parte aérea de la viña y, por otro, evitamos una densidad alta de hojas que favorece la proliferación de diferentes plagas.
El deshojado y destallado mejora la ventilación del cultivo. Aunque esta ventaja es muy atractiva frente a hongos y bacterias, también lo es para plagas, ya que se permite una mayor cobertura y penetración de los insecticidas y acaricidas.
Sintomatología de la araña amarilla
A la hora de interpretar si debemos o no realizar tratamientos de control frente a la araña amarilla, se realiza la siguiente clasificación según la incidencia de la plaga:
- Tipo 0: viña sin daños.
- Tipo 1: viña con daños localizados en la parte inferior de la cepa, por debajo de la formación de los racimos.
- Tipo 2: viña con daños en toda la masa foliar de la cepa, incluida las partes vegetativas por encima de los racimos.
Leer más: la alarmante yesca de la vid
Cuándo realizar tratamientos acaricidas
Floración
Los tratamientos de control contra la araña amarilla se inician a partir de floración, cuando hemos detectado daños sobre el cultivo en, aproximadamente, el 5% de las cepas (síntomas tipo 1 y tipo 2).
Inicio de verano
En casos con temperaturas cálidas más tardías, se revisará incidencia a partir de junio y julio, con un 25% de cepas afectadas de Tipo 1 y un 5% de cepas con Tipo 2.
Control químico de la araña amarilla
A través del siguiente enlace encontrarás los productos fitosanitarios autorizados para el control de la araña amarilla.
Leer más: productos autorizados contra araña amarilla.
Control ecológico
En agricultura ecológica, la prevención es el principal mecanismo para controlar diferentes enfermedades y plagas. Frente a hongos, el cobre es una de las mejores alternativas, y en el caso de la araña amarilla, el azufre es un producto eficaz si lo utilizamos anticipadamente antes de que la plaga evolucione desfavorablemente.
Se suele aplicar un máximo de 20 a 30 kg por hectárea, con hasta 3 aplicaciones, evitando su aporte en los meses más cálidos de la campaña para evitar posibles quemaduras.
Foto de portada: derechos de fotografía atribuidos a Julio Prieto. Resto de fotografías: Subdirección General de Sanidad de la Producción Primaria y de los Servicios de Protección de los Vegetales y Sanidad Vegetal de las Comunidades Autónomas.
Source: www.agromatica.es
