Mejora de la producción de ave de corral sin antibiótico

Edgar Oviedo
O. Oviedo Rondón

La producción de aves de corral libres de antibióticos (ABF) es ahora una tendencia común en todo el mundo, ya que algunos gobiernos han prohibido los antibióticos promotores del crecimiento (GPA) y porque muchos consumidores evitan cada vez más los productos alimenticios que contienen antibióticos. A pesar de que el GPA ha sido una herramienta excelente para controlar la disbacteriosis y los enteropatógenos en la producción animal durante los últimos 50 años, la publicidad negativa del GPA en los medios, así como las tendencias del mercado y las oportunidades de comercialización percibidas, indican que la mayoría de la industria avícola ahora debería implementar algún nivel de producción de ABF.

Muchas compañías avícolas tienen años de experiencia trabajando con el sistema ABF. Algunos todavía tienen dificultades para controlar diversos desafíos de salud, mientras que otros han tenido experiencias exitosas, debido a las mejoras en la vivienda y los cambios en los programas de alimentación, administración y salud. Estas medidas, implementadas para controlar la multitud de factores que pueden afectar la salud intestinal, conllevan costos adicionales. Los sistemas ABF pueden ser rentables, siempre que los precios de los productos ABF finales puedan cubrir los costos implicados en las inversiones necesarias para desarrollar estos productos.

Existen numerosos conceptos sobre las formas en que los sistemas ABF en la producción de carne de aves de corral se pueden implementar o mejorar para alcanzar las condiciones de salud y bienestar de la parvada, al tiempo que se mejora la productividad.

Sistemas de producción ABF

¿Cuál es el nivel de producción de ABF que la empresa avícola quiere alcanzar?

Existen muchas categorías en la producción de ABF, dependiendo del tipo de certificación, reclamos de mercado o productos que se ofrecerán a los consumidores. Algunos de estos grupos principales son:

1. Los programas ABF estándar que permiten el uso de antibacterianos químicos, anticoccidios químicos e ionóforos, pero no antibióticos.

2. Producción orgánica sin antibióticos, coccidiostáticos ionóforos, anticoccidios químicos o antibacterianos químicos como las sulfonamidas.

3. Sistemas como el Programa de Verificación de Procesos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) llamado USDA-AMS Never Ever 3 (NE3) Programa que no permite antibacterianos químicos como sulfonamidas o antibióticos, pero permitirá coccidiostatos químicos o ionóforos. Además, no se permiten subproductos animales ni compuestos sintéticos que promuevan el crecimiento en la alimentación animal.

Cada sistema puede plantear ciertas dificultades para los productores que manejan la salud de la parvada. Por ejemplo, podrían implicar mayores costos de producción, menores niveles de productividad y dificultades para lograr una baja mortalidad y un buen bienestar de las aves de corral.

Manejo de nutrientes para la producción exitosa de ABF

Un error común en torno a la producción de ABF es centrarse solo en el control de la enfermedad intestinal. En general, se presta atención a los coccidios o enterobacterias específicas como Clostridium o Salmonella. Este malentendido proviene de experiencias diarias que indican que éstos son los principales problemas de salud observados cuando se implementa cualquier programa ABF. Sin embargo, la realidad es que éstas son las consecuencias y no las causas del problema principal. El exceso de nutrientes en el intestino posterior, ya sea por niveles altos en la dieta o por digestibilidad subóptima, causa la proliferación microbiana en el intestino posterior.

Los nutrientes en exceso, especialmente las proteínas y las grasas, no se digieren y absorben bien al final de cada fase de alimentación. Esto aumenta la proliferación microbiana en la ceca. La digestibilidad adecuada se puede lograr y mantener una vez que no haya demasiados nutrientes en la dieta. Esto puede ayudar a controlar todos los microbios y las enfermedades que generan. Por lo tanto, la alimentación por fases o el aumento de las fases dietéticas que se ofrecen actualmente para mejorar la precisión de la formulación del alimento, de acuerdo con las necesidades de los animales, es necesaria para la producción de ABF.

La digestibilidad adecuada del intestino anterior es crucial para obtener lo mejor de la producción de ABF

Los siguientes pasos son necesarios para estimular la función digestiva adecuada en todas las especies de aves de corral:

• Ofrezca todos los ingredientes del alimento con una granulometría o tamaño de partícula que estimule la función de la molleja.
• Mantenga el pH del agua entre 5 y 7, y la temperatura del agua entre 16 y 25°C.
• Agregue ácidos orgánicos en el alimento o el agua para garantizar condiciones de pH del cultivo ligeramente ácidas.
• Minimiza la dureza y alcalinidad del agua.
• Evite niveles de calcio más altos que los requeridos para cada edad y fase productiva.
• Disminuya los niveles de grasa adicional, si es posible, pero mantenga un mínimo de 1% para estimular la función gástrica y retrasar la liberación de digesta desde la molleja hasta el intestino delgado.
• Use enzimas exógenas que ayuden a degradar fitato, β-mananos, xilanos y otros polisacáridos sin almidón.

Las enzimas exógenas son la segunda mejor herramienta para controlar la proliferación de bacterias en los intestinos. Han sido ampliamente adoptados debido al impacto de ahorro de costos en la formulación de la dieta y como potenciadores de la productividad. Un efecto secundario de todas las enzimas es su impacto positivo en las Comunidades Microbianas (MC) intestinales. Las enzimas exógenas reducen la proliferación microbiana al reducir los componentes no digeribles del alimento, la viscosidad de la digesta o la irritación de la mucosa intestinal. Las enzimas también generan metabolitos que promueven la diversidad microbiana que ayuda a mantener ecosistemas intestinales más estables que tienen más probabilidades de inhibir la proliferación de patógenos.

Alimentación y calidad del agua

Los alimentos de buena calidad son esenciales para una digestibilidad óptima. Por lo tanto, cada alimento debe evaluarse por su calidad y por los posibles factores que pueden afectar la digestión.

La calidad del agua y el consumo suficiente de agua también es importante para ayudar a una digestión adecuada. Las características fisicoquímicas deben medirse y controlarse y el pH debe mantenerse ligeramente ácido, entre 5 y 7, porque el pH básico del agua reduce la actividad de la mayoría de las enzimas.

De la misma manera que la privación de agua puede causar problemas intestinales, la retirada de alimento durante el crecimiento debe evitarse por completo en los programas ABF. Después de 5 o 6 horas de extracción de alimento, los rasgos de la mucosa intestinal cambian, haciendo que los pollos sean más susceptibles a la enteritis mucoide. La retirada de alimento estimula la producción de mucina por las células caliciformes en la mucosa intestinal. Esta mucina extra es usada con avidez por las bacterias, irritando la mucosa, generando más moco y reacciones inflamatorias. La alteración de las propiedades mucosas facilita la adherencia de enteropatógenos y la infección por coccidios.

Productos alternativos para modular la microflora intestinal

Algunos aditivos alimenticios y niveles de minerales pueden ayudar a mantener una CM saludable en todas las regiones intestinales. Esto puede ocurrir independientemente de la abstinencia de alimento, infecciones intestinales con coccidios o estrés por calor e incluso mantener la diversidad normal de MC observada en grupos de control de pollos. Por lo tanto, estos productos se convierten en una herramienta adicional para la producción de ABF.

FIGURA 4: El papel de las comunidades microbianas intestinales en el tracto gastrointestinal (GIT).

Aditivos alternativos para piensos nuevos

Se pueden incluir una serie de aditivos en los piensos para mejorar la salud intestinal, como probióticos, prebióticos, enzimas, ácidos orgánicos y aceites esenciales (extractos de plantas, extractos de hierbas, fitobióticos):

• Los probióticos introducen microorganismos vivos deseables en el GIT.
• Los prebióticos promueven el crecimiento de bacterias deseables en el GIT.
• Las enzimas ayudan a eliminar los efectos antinutricionales de los polisacáridos solubles en agua y/o cambian los sustratos para mejorar la proliferación de algunos MC beneficiosos.
• Los ácidos orgánicos causan la inhibición del crecimiento bacteriano.
• Los aceites esenciales pueden apoyar el equilibrio de la microflora intestinal, estimular la producción de enzimas digestivas y el sistema inmunitario.

La combinación de probióticos y prebióticos se puede denominar simbióticos. Cada tipo de producto ha demostrado una eficacia variada mientras se administra de forma independiente o en combinaciones. Es importante señalar que cada grupo de productos discutido es una gran categoría, tan amplia como los antibióticos y, en consecuencia, casi cada producto tiene una característica y un efecto únicos. Solo las pruebas, el uso y la rotación adecuados pueden garantizar su éxito en un programa ABF sostenible.

Mezclas de aceites esenciales (EO)

Una categoría de fitobióticos, las mezclas de EO son mezclas de compuestos fitoquímicos con propiedades antimicrobianas selectivas, como carvacrol, timol, cinamaldehído, entre otros. Algunas mezclas específicas de EO han mostrado resultados prometedores hacia la reducción de la colonización de Clostridium perfringens y la proliferación y el control de la infección por coccidios, lo que ayuda a reducir la enteritis necrótica. Además, una combinación de EO con ácido benzoico ha mostrado una reducción en la producción de mucina en el intestino delgado para pollos de engorde.

GRÁFICO 1: Efectos de la mezcla de aceites esenciales en la producción de mucina ileal en pollos de engorde a los 46 días.

Ambiente de la casa y bioseguridad

Deben observarse las condiciones ambientales adecuadas para la producción efectiva de ABF. Se debe considerar la temperatura óptima, la velocidad del aire y la humedad relativa de acuerdo con la edad, la fase de producción y el tamaño de las aves. Cualquier ave bajo estrés ambiental, debido al calor, el frío, el aire muy seco o muy húmedo, podría afectar sus patrones de consumo de alimento y la motilidad intestinal, causando una digestibilidad reducida. Los programas de iluminación también pueden afectar los comportamientos de consumo de alimento, la motilidad y la digestión. Las intensidades de luz inferiores a 10 lux y 4 a 6 horas de oscuridad total por día mejoran las relaciones de conversión alimenticia, lo que indica una ingesta más lenta y una mejor digestibilidad. La buena ventilación de la casa es clave para los programas ABF para minimizar la condensación, la humedad de la basura y el apelmazamiento. Mantener la humedad de la cama debajo del 30% es el objetivo,

Salud del rebaño

La prevención de la coccidiosis y la enteritis necrótica son normalmente las principales preocupaciones durante la producción de ABF. En los casos en que no se permiten medicamentos anticoccidiales, las vacunas contra la coccidiosis y el manejo de la basura son las principales formas de controlar Eimeria spp. La vacuna Cocci para pollos de engorde se ha aplicado en los sistemas tradicionales de producción avícola y en los nuevos programas ABF durante años, en muchos países. Sin embargo, el control de otros parásitos intestinales, gusanos y enfermedades avícolas que tienen un impacto en los intestinos y la inmunidad, también es necesario cuando se trabaja para mejorar los programas de salud para todo el ciclo de producción de ABF. La vacunación adecuada de los criadores, y en la planta de incubación, puede ayudar a prevenir Newcastle, la enfermedad infecciosa de la bolsa y la bronquitis infecciosa. Vacunas específicas para Salmonella o E. coli.

Prácticas de bioseguridad: por qué son importantes:

Las prácticas diarias de bioseguridad funcional son necesarias para garantizar que las bandadas reproductoras y las granjas de cultivo estén libres de Mycoplasma gallisepticum y Mycoplasma synoviae. Las prácticas incluyen:

Bioexclusión: limitación de visitantes, vehículos y equipos que visitan otras granjas avícolas.

Biocontención: aislar las casas, controlar insectos, roedores y la entrada de aves silvestres y otros animales a las casas.

Mejorando la salud del criador

La nutrición de los reproductores de pollos de engorde es fundamental para el desarrollo adecuado de su progenie. El desarrollo del embrión depende totalmente de los nutrientes del huevo depositados por las gallinas. Los nutrientes específicos como la vitamina D, minerales traza, carotenoides y ácidos grasos juegan un papel clave en la inmunidad y el desarrollo intestinal. Las gallinas afectan la nutrición y el desarrollo del embrión por las propiedades del cascarón, como la porosidad del huevo y el grosor del cascarón, que determina la conductancia. La conductancia de la cáscara de huevo dicta la capacidad de los huevos para intercambiar gases y vapor de agua, lo que afecta la yema de embrión y la utilización general de nutrientes.

Estos factores físicos, especialmente la capacidad de obtener suficiente oxígeno, limitan el tipo de metabolismo, las tasas de desarrollo de tejidos y el crecimiento de embriones. Esto es más importante durante los últimos tres o cuatro días de incubación antes de la eclosión, en la etapa de meseta de consumo de oxígeno cuando el desarrollo de muchos tejidos, incluidos GIT, huesos y músculos, se encuentra en su tasa más rápida. Como los mejoradores pueden transferir microbios intestinales e inmunidad a su progenie, las compañías que practican los programas ABF deben asegurarse de que la salud intestinal sea adecuada en los mejoradores y que sus programas de vacunación sean efectivos, para evitar problemas en la descendencia.

Los resultados de la investigación indican que las temperaturas elevadas durante las últimas fases de incubación reducen la masa de tejido GIT y la actividad enzimática

Por ejemplo:

• El peso promedio de los pollitos se reduce en un 5%, lo que corresponde a 2-3 gramos.
• El tamaño relativo del proventrículo, molleja e intestino se redujo en 13, 14 y 16%, respectivamente.
• En la eclosión, la incubación subóptima redujo la longitud del intestino.
• La enzima maltasa disminuye drásticamente de los pollitos sobrecalentados en comparación con los pollitos incubados a temperaturas óptimas de cáscara de huevo.

Estos efectos tienen implicaciones en la capacidad digestiva de los polluelos y probablemente en la incidencia de problemas intestinales y resistencia a los parásitos.

La incubación subóptima generalmente tiende a aumentar la ventana de eclosión, lo que hace que algunos pollitos eclosionen demasiado temprano, 36 a 48 horas antes de sacarlos de las nacedoras, o demasiado tarde. Ambas condiciones causan problemas con el desarrollo del tejido linfoide asociado con el intestino y la inmunidad general. Los polluelos sin acceso al alimento y al agua durante 48 horas después de la eclosión mostraron un retraso en todas las respuestas de inmunidad en el ciego y el colon y en la colonización de linfocitos en la bolsa. Esto provoca una reducción de la actividad inmune durante las dos primeras semanas de vida, cuando se aplica la mayoría de las vacunas primarias y las aves tienen su primer contacto con posibles enteropatógenos.

Conclusión

Los programas ABF para la producción de carne de aves se están volviendo más comunes. Para que estos programas tengan éxito, se debe prestar atención adicional a todo el sistema de producción. No solo son importantes los piensos, los aditivos alimentarios o el control de patógenos entéricos, sino también la gestión de la vivienda, la calidad del agua y la bioseguridad en los niveles de mejoramiento y crecimiento. Incluso las condiciones adecuadas de criadero deberían mejorarse para que los programas ABF tengan éxito.

En el lado nutricional, se debe utilizar la precisión de la formulación del alimento y la alimentación por fases. El procesamiento de alimento, usando molienda gruesa o granos enteros, es necesario para estimular la función de la molleja y el peristaltismo. Además, se deben implementar programas de control de calidad de alimentos más estrictos. El uso de enzimas exógenas juega un papel clave para ayudar a mejorar la digestibilidad y mitigar el impacto negativo de algunos componentes antinutricionales. Los aditivos para piensos con características eubióticas son herramientas importantes para modular la microflora cada vez que cualquiera de los otros factores revisados previamente causan la proliferación de bacterias y, por lo tanto, ayudan a aumentar la productividad en los programas ABF.

Artículo Publicado en Los Avicultores y su Entorno Octubre -Noviembre 2020

Source: bmeditores.mx

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